¿Estudiar o ser mamá?

Te encuentras ante la fotografía titulada Estudiar o ser mamá, tomada por Marta Ramírez el 30 de septiembre de 2024 en Granada. La autora es estudiante de Máster en Psicología de la Universidad de Granada. La fotografía se dispone en posición vertical.

Estanterías de madera a un lado y a otro; rodeadas por libros. Carteles de conferencias, talleres …

Entretanto, una luz tenue y serena baña la escena: la luz solar se filtra a través de los ventanales y paredes de cristal. En el centro de este espacio de calma y concentración, una mujer sostiene a su bebé en brazos. La calidez de la vida y el amor se reflejan en ella mientras observa los estantes de madera, meticulosamente ordenados y repletos de libros que prometen conocimiento y descubrimiento.

Con un brazo sostiene al pequeño, con el otro busca entre los volúmenes, sin soltar ni por un instante a su hijo, con quien comparte ese instante que aúna crecimiento personal y familiar, trabajo y vida. No parece ser la única cautivada por las monografías: el niño, curioso, observa con atención el libro que su madre ha elegido, como si, de algún modo, también él intuyera la magia contenida en sus páginas.

Los movimientos de la mujer son delicados pero seguros, al igual que deben ser los pasos que se dan en la vida. Su cabello oscuro cae sobre su espalda. Lleva un vestido verde caqui, ajustado, que contrasta con el chal crema de punto que cubre parcialmente sus brazos y espalda. Sobre su brazo también está la pequeña mano infantil, recubierta de un blanco pelele, que busca su contacto y seguridad.

El bebé, ajeno al significado de este momento, con su pequeña cabeza estirada, aunque levemente girada hacia su madre, parece acceder a participar de este instante. Sin embargo, la historia detrás es más grande: la búsqueda de equilibrio entre la maternidad y la educación, entre el instinto de cuidar y el deseo de aprender. Su brazo extendido para coger un libro, ¿simboliza acaso su intento de alcanzar algo más allá de las páginas: la posibilidad de avanzar, de crecer, de ofrecerle a su hijo un futuro mejor…?

El eco de sus dulces comentarios se entremezcla con el silencio o el leve murmullo de la biblioteca y con el sonido distante de páginas que se pasan, un clima de armonía encapsula el momento.

En la pared, el cartel de aviso de “Silencio” recuerda las normas de este espacio, pero también evoca un tipo de silencio más profundo, el de las elecciones que muchas mujeres hacen sin palabras, enfrentándose a las demandas de la vida diaria y las exigencias de la sociedad. Los carteles que celebran el Día Internacional de la Mujer refuerzan la simbología de esta escena: una madre que, incluso cargando con un hijo, no deja de buscar su propio camino en un mundo lleno de desafíos, decidida a superar cada límite juntos.

Bajo la imagen se encuentra un breve texto en el que la autora expone el significado de esta fotografía. Se lee lo siguiente:

Esta imagen La lucha por la igualdad en el acceso a estudios superiores ha sido ardua, pero aún queda mucho por avanzar. Las mujeres enfrentan la disyuntiva de posponer la maternidad o abandonar temporalmente sus estudios debido a la necesidad de especialización profesional. Esta realidad afecta a muchas, pero el cambio es posible. Un ejemplo es una estudiante de la facultad de psicología de la UGR, quien en 2023/24 continuó sus estudios con su bebé de tres semanas, recibiendo apoyo de la comunidad universitaria. Hoy, con su hijo de seis meses, sigue su máster, demostrando que los retos pueden superarse con apoyo y valentía.